Portugal pone en marcha el intenso control en el paso de frontera Fuentes de Oñoro-Vilar Formoso

Desde este sábado y hasta el día 7 de agosto, con motivo de las Jornadas Mundiales de la Juventud que se desarrollan en Lisboa próximamente

Los protocolos de seguridad de cara a la próxima celebración de las Jornadas Mundiales de la Juventud, que se desarrollarán en Lisboa, ya han comenzado en la frontera entre Fuentes de Oñoro y Vilar Formoso, uno de los 21 puntos de control autorizados para el acceso al territorio luso.

Las medidas ya son palpables en el primer día, y es que la Guarda Nacional está muy presente en el paso fronterizo, en el que pide documentos de identidad a todo vehículo y, lo que es más inusitado, a todo peatón que se dispone a cruzar la frontera a pie, un gesto muy habitual entre los habitantes de Fuentes de Oñoro, que a menudo cruzan a pie a Vilar Formoso, y viceversa.

También se exige identificación y acreditación a los medios de comunicación que acuden al corazón del paso fronterizo para fotografiar y grabar el desarrollo de la jornada. Por el momento el tránsito es el habitual en estas fechas. «De momento es lo de siempre, gente de Suiza sobre todo, personas que van de vacaciones», señala un agente de la Guardia Nacional Republicana a LA GACETA.

Esta medida es iniciativa del Gobierno portugués, que ha decidido extremar las precauciones debido a la visita del Papa, acto central enmarcado en estas jornadas promovidas por la Iglesia Católica, y en las que participan jóvenes provenientes de más de 150 países de todo el mundo. La última vez que se pidió identificación para cruzar a Portugal fue durante la pandemia, en la cual solo trabajadores y residentes podían cruzar, así como personas con doble nacionalidad.

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